NADA NUEVO

Por Rodolfo Rivera Pacheco

Supuestamente, se esperaba que ayer por la tarde, se supiera algo que pondría a favor para el Gobierno estatal, el marcador en la polémica Nacif-Cacho-Marín. Pues nunca llegó tal. No sucedió nada que no se esperara ya. Aunque quizás no se esperaba tan duro.

Porque el Congreso de la Unión, en sus dos Cámaras, ratificó la decisión de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, atraiga el caso de la violación de los derechos humanos de la escritora Lydia Cacho por parte del Gobierno del Estado de Puebla, como producto de las grabaciones de las conversaciones entre Mario Marín y Kamel Nacif.

Pero hasta ahí, creo que todo ya estaba calculado por el propio Gobierno estatal. De hecho, fue el propio Gobernador Marín el que solicitó desde el fin de semana de las arengas revolucionarias, la intervención de la propia Suprema Corte. Pero lo que no esperaban era que la votación fuera absolutamente mayoritaria y que, además, hubiera priístas que denostaran y hasta llamaran sinvergüenza y depravado al titular del Ejecutivo estatal.

En el Senado las cosas también anduvieron por el estilo.

Así que, honestamente, las actitudes hacia el Gobernador por parte de su partido ya no son las óptimas. Es más, yo diría que es el comienzo del deslinde definitivo. Pero más aún, Madrazo en Colima se dijo "muy molesto" por todo el escándalo. Y no defendió a Marín, como alguien seguramente interpretará a su manera la expresión. Para nada. Es un deslinde claro, aunque no lo quieran ver así.

Y aún con todo, como decíamos ayer en este mismo espacio, todo lo anterior no significa que Marín vaya a dejar el cargo. No. Creo que el asunto seguirá por el camino de cualquier proceso judicial en este país: Más lento que una tortuga con reumas. Sin embargo, existe la posibilidad de que el Senado, una vez que la Suprema Corte haga un dictamen en contra, sí pueda declarar desaparición de poderes en el Estado. Es una muy remota posibilidad, pero de que está ahí, está ahí.

Y por último, aún cuando el candidato presidencial rompiera con el Gobernador, eso tampoco significaría su salida. Creo que se buscaría el refugio de la aldea y quizás hasta se podría terminar el sexenio. En medio de una andanada de críticas y burlas, eso sí. Pero de que el escenario también es posible, pues no podemos negarlo.

Así que sólo resta esperar a que el Senado se reúna mañana jueves, para ver si llegan a decretar desaparición de poderes, acudiendo al mentado 76 constitucional. Ayer no lo hicieron, supuestamente por respetar el luto que envolvía al propio Gobernador. Quién sabe si mañana sí se animen. Yo lo dudo (el Senado tiene mayoría absoluta priísta). Creo que lo que pasará es que los Senadores se esperarán a lo que dictamine la Suprema Corte. Y conociendo a los Ministros, ya puede usted irse buscando una silla para esperar el resolutivo.