lunes, octubre 02, 2006

RAZONES PODEROSAS PARA NO PERMITIR QUE UN INCULTO GOBIERNE.

EL HECHO QUE EL CAPO CHON MARRANO MARRANÍN TORRPES ABORREZCA SU HUMILDE ORIGEN, ES LA POCA IMPORTANCIA QUE SIEMPRE LE OTORGÓ A LA NECESIDAD DEL CONOCIMENTO.

SOLO TUVO COMO OBJETIVO EN LA VIDA SER MILLONARIO Y PODEROSO, ¿Y EL CONOCIMIENTO, LOS LIBROS, LA TECNOLOGÍA, ETC.? PARA NERDS.


La quinta columna de Mario Alberto Mejía
quintacolumna2005@gmail.com


Las Amenazas de Marín.

En las crisis siempre salen a flote lo mejor y lo peor de las personas.

En la crisis que desde el 14 de febrero vive el gobernador Mario Marín Torres ha salido sólo lo peor.

Sus primeras salidas —con Loret de Mola y con López Dóriga— evidenciaron a un gobernador titubeante, inseguro, regañado.

¿Cómo olvidar que Carlos Loret de Mola lo ridiculizó hasta el cansancio?

Y López Dóriga lo enfrentó con todo y utilizó sus recursos periodísticos para ello.

Lo llevó al centro del ring.

Lo llevó a las cuerdas.

Lo llevó a donde quiso.

En consecuencia, el gobernador titubeó una y mil veces.

Y hasta recibió un regaño del periodista.

Pero lo peor llegó con el alba.

Muy temprano, al día siguiente, Loret de Mola lo recibió con ironías y burlas.

Y se empeñó en exhibirlo hasta el cansancio.

Sus preguntas eran dardos venenosos.

Y vaya que cumplieron su objetivo.

En la pantalla chica, el rostro del gobernador se veía turbado.

Como un fajador rudo, Loret de Mola se le fue encima cada vez que quiso.

Hasta que explotó el gobernador.—No le creo, gobernador —espetó el periodista.—Pues yo tampoco te creo —respondió Marín.

Era el final.

Un triste final que incluyó también varios regaños.

Varias de estas líneas fueron redactadas en los días que siguieron al 14 de febrero.

Cuando el gobernador se volvió un experto de las verdades a medias.“Es mi voz, pero no es mi voz”, dijo entonces.Y lo sigue diciendo ahora.


Tiempos de Nigromante de Arturo Rueda
artrueda@laquintacolumna.com.mx


La mediocridad marinista

En el diseño de su gobierno Mario Marín cometió un error fundamental que la postre mostraría sus consecuencias en la larga agonía del escándalo de Lydia Cacho: entregar el poder a amigos y aduladores, en vez de conformar una administración profesional que pudiera responder a los retos de la sociedad de la información y a la globalización.

Un análisis empírico de los currículos de los miembros del gabinete nos muestra hasta que grado la política poblana ha sido secuestrada por mediocres que no tienen la menor idea de nada, y que como tampoco puede aconsejar nada, en conjunto dinamitaron la administración de Mario Marín.

Veamos las evidencias.

El primer requisito que Marín estableció para formar parte del gabinete y su grupo cercano no fue la preparación académica, la experiencia profesional o las relaciones nacionales o internacionales que pudiera aportar a la construcción de un gobierno.

En vez de eso el gobernador eligió un único requerimiento: ser su amigo, conocido, o haber laborado con él en el ayuntamiento.

Así surgió la orgullosa burbuja marinista que cerró los espacios a cualquiera que no fuera del grupo original: Javier López Zavala, Valentín Meneses, Javier García Ramírez y por fuera –en el brazo político del gobierno- Mario Montero.

Nada excepcional puede decirse de los cuatro integrantes originales de la burbuja marinista. Y a estas alturas parece que nada bueno.

Su única condición original parece ser compatir el hecho de ser amigos de la juventud –Vale y Montero-, compañeros de juerga –todos-, empleados –todos- y aduladores –todos-.

También comparten el hecho de que todos sus trabajos y fortuna se la deben únicamente a las oportunidades que Marín les dio en sus diferentes posiciones: gobernación, PRI, presidencia municipal y gubernatura.

Pero por sí mismos, no se destacan en nada.

Para los cuatro integrantes originales de la burbuja marinista antes de Marín, nada, y con Marín, todo.

Sus carreras profesionales son profundamente mediocres –puestos de tercer nivel y quizá una notaría como dádiva-, pero las académicas todavía son peores: todos ellos con esfuerzo culminaron una licenciatura, y ni hablarles de maestrías o doctorados.

Sin especialidad alguna, salvo la de fungir de abrepuertas –cargos que desempeñaron eficazmente Zavala y Vale-, sus aportes a la concepción de lo que debe ser un gobierno son absolutamente nulas.

Su única expertis es dotar de trabajo remunerado con cargo al erario a sus pares. Es decir, reproducir su mediocridad en todos los demás niveles de gobierno.

Como jefe de gabinete, Zavala ha sido el gran reproductor de la mediocridad en el gobierno estatal.

Temeroso de la preparación académica y del expertis, todos los nombramientos que ha sugerido tienen una misión: impedir la llegada de calidad al gabinete que pudiera opacar su mediocridad.

En pocas palabras, impedir que llegue la luz que desnuda la ausencia de cualidades.

Por eso el secretario de Gobernación se entiende muy bien con un subgrupo de la burbuja marinista, o más bien algo que podríamos llamar la burbuja zavalista.

Veamos los nombres.

1. Darío Carmona, secretario de Educación Pública, cuyo único mérito para llegar al cargo fue ser maestro de aula, cantautor de boleros y movilizador del PRI en la campaña a la gubernatura. Por supuesto de verdadera educación –sus contenidos o procesos de calidad- no tiene la menor idea. }

1. Lauro Sánchez, oscuro coordinador de asesores que regresó al gobierno con la cola entre las patas después de perder la diputación federal por Zacatlán. Sin experiencia académica o política, solamente se conocen sus antecedentes policíacos en la Dirección de Investigación en Gobernación. Más mediocre, imposible.

1. Mario Ayón. Más listo para el retiro que para seguir siendo un funcionario, al general se le tenían amplias esperanzas por sus antecedentes en la milicia. Poco ah podido aportar a la seguridad pública de Puebla porque desconoce las modernas teorías de prevención del delito. En lugar de combatir a los delincuentes, parece más preparado para irse a cuidar a sus nietos.

1. Roberto López, cancerbero del gobernador desde la secretaría particular, sólo daba audiencias a los recomendados del secretario de Gobernación. Por ello el resto de los poblanos dejó de reunirse con Marín. Incluso con otros secretarios. Su paradero es un misterio luego de que fue desalojado del curul de Nancy de la Sierra en el Congreso del Estado.

1. Alejandro Armenta, titular de Desarrollo Social. Se relacionó con Zavala en el Congreso del Estado, por lo que se ingreso de produce cuando Armenta ya tenía una carrera política propia: había sido alcalde de Acatzingo y diputado local. Su esfuerzo por aprender en el DIF estatal y ahora Sedesol lo hace el único personaje rescatable de la burbuja zavalista.

1. Lázaro Jiménez, subsecretario de Transporte en SCT, aunque lo único que sepa del cargo fue la experiencia de usar combis para irse a pasear a CU, más no a estudiar. Si uno viera su cardex universitario, el único trabajo que alguien podría darle sería de cerrillo en Wal-Mart, sin ofender a los cerillos de Walmart.

Mañana continuaré con el tema de los aduladores y mediocres del gobierno marinista.


*** Los libros no muerden. A Marín le hace falta aprender a gobernar. Sus años en los sótanos de la política poblana fueron insuficientes. Si su aversión a los libros pudiera ser derrotada, podría leer el mejor manual del cómo gobernar. Se trata por supuesto de El Príncipe de Maquiavelo, una obra de pequeño tamaño, pero de trascendencia universal. Aunque todo aspirante a político por lo menos lo ha ojeado, Marín parece ser el único que no lo hizo, dados los errores garrafales que cometió al elegir a sus ministros.

Respecto del tema, escribe Maquiavelo:

“No es punto carente de importancia la elección de los ministros, que será buena o mala según la cordura del príncipe. La primera opinión que se tiene del juicio de un príncipe se funda en los hombres que lo rodean: si son capaces y fieles, podrá reputárselo por sabio, pues supo hallarlos capaces y mantenerlos fieles; pero cuando no lo son, no podrá considerarse prudente a un príncipe que el primer error que comete lo comete en esta elección”.

“…Pero es necesario saber que, hay entre los príncipes, como entre los demás hombres, tres especies de cerebros. Los primeros piensan y obran por sí y ante sí; los segundos, poco aptos para inventar, poseen sagacidad selectiva en atenerse a lo que les proponen otros; los terceros no conciben nada por sí mismos, ni nada tampoco sacan en limpio de ajenos discursos. Los primeros son ingenios superiores; los segundos son talentos estimables; los terceros son como si no existiesen.”

“Cuando un príncipe, carente de originalidad creadora,
posee inteligencia suficiente para discernir con mesura juiciosa lo que se dice y lo que se hace, conoce las buenas y malas operaciones de sus consejeros, para apoyar las primeras y corregir las segundas, y no pudiendo sus ministros abrigar esperanzas de engañarle, se le conservan íntegros, discretos y sumisos”.

“Para conocer a un ministro hay un modo que no falla nunca. Cuando se ve que un ministro piensa más en él que en uno y que en todo no busca sino su provecho, estamos en presencia de un ministro que nunca será bueno y en quien el príncipe nunca podrá confiar. Porque el que tiene en sus manos el Estado de otro jamás debe pensar en sí mismo, sino en el príncipe, y no recordarle sino las cosas que pertenezcan a él”.

“Por su parte, el príncipe, para mantenerlo constante en su fidelidad, debe pensar en el ministro. Debe honrarlo, enriquecerlo y colmarlo de cargos, de manera que comprenda que no puede estar sin él, y que los muchos honores no le hagan desear más honores, las muchas riquezas no le hagan ansiar más riquezas y los muchos cargos le hagan temer los cambios políticos. Cuando los ministros, y los príncipes con respecto a los ministros, proceden así, pueden confiar unos en otros; pero cuando proceden de otro modo, las consecuencias son perjudiciales tanto para unos como para otros”.

CREO QUE ESTA LECTURA OBLIGADA ES DEMASIADO PARA EL MARRANO MARRANIN, YA QUE RECORDEMOS QUE EL 13 DE FEBRERO DE ESTE AÑO, TODA LA BURBUJA MARINISTA ESTABA HASTA LA CHANCLA DE ALCOHOL POR HABER FESTEJADO EL CUMPLEAÑOS DEL VALE POCO SESOS MENESES, Y AL AMANECER CON LA NOTICIA DE LYDIA CACHO, A TODOS LOS TOMÓ CON LOS CHONES EN EL PISO Y LAS PUTAS A SU LADO.


No hay comentarios.:

Counters
Internet Access Provider